Si te has decidido por un tratamiento de ortodoncia, en primer lugar, ¡darte la enhorabuena! En unos meses tus dientes estarán perfectamente alineados, mejorarás tu mordida y conseguirás una mejor higiene bucodental.

Para que tu tratamiento sea todo un éxito, te hemos elaborado un listado con aquellos alimentos que no debes comer desde el día en que tu dentista te coloca el aparato y durante todo el tratamiento. Veamos:

• Nada de chicles ni caramelos. Da igual que tengan azúcar o no, sean duros o masticables. Durante unos meses tendrás que olvidarlos.
• Olvida los frutos secos y los kikos durante el tratamiento, y despídete también de las aceitunas con hueso. Si eres un apasionado de las olivas, tómatelas sin huesos.
• Las gominolas y todas las “chuches” también quedan prohibidas. Se pegan a los dientes y al aparato, así que tendrás que prescindir de ellas.
• Si te gusta un buen bocata, cómetelo con el pan blando. Evita el pan de corteza dura.
• No te comas la fruta a bocados. Trocéala en pedazos pequeñitos y disfrútala.
• Evita los alimentos duros, y si tienes un antojo insuperable, trocéalos en pequeños pedazos y mastícalos con las muelas.
• Sáltate ese picoteo “entre comidas”… 🙂
• Si tienes la manía de mordisquear el boli, es el momento de superarla. Ni bolis, ni dedos en la boca.
• Y por último, no te muerdas las uñas ni los labios.

Si sigues estas recomendaciones, ayudarás, y mucho, a que tu tratamiento será todo un éxito.

Y ahora, la parte buena. Esto alimentos sí puedes comerlos:

• Bocadillos de pan de molde o pan tierno.
• Hamburguesas.
• Sopas de guisos, carnes y pescados a la plancha.
• Frutas y verduras siguiendo las indicaciones de más arriba.
• Postres
• Patatas fritas, fritos, Doritos, guisanitos, palomitas…

Y por último, y no por ello menos importante, no olvides cepillarte los dientes cada vez que comas. Comas lo que comas, después, cepíllate los dientes.